Hay otro Montevideo al que llegué hace poco, que tiene el ritmo de los pasos de zapatos cómodos que avanzan cuidadosos y en silencio. En esa ciudad habitan otros montevideanos, que parecen menos prepotentes, menos prejuiciosos, que surgen desde lugares invisibles en la ciudad.
Como en un hechizo que permite ver pero no hablar, este descubrimiento me llegó sin palabras, y se hizo silencio en Montevideo me mata.
martes, marzo 04, 2008
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3 comentarios:
Me gusto mucho tu pag. muy lindo lo que escribes.
Quizas sea un poco por mi gusto o mi mal gusto que no me gusta Mercedes Sosa pero si la cancion, pense que era la de Chavela Vargas, si te interesa te dejo enlace a you tube:
http://www.youtube.com/watch?v=-mnZcErj-SA
Insisto,muy buena tu pag..
Hay silencios imprescindibles ... es bueno descubrirlos para poder mirar a fondo.
Precioso Sole!!
Un beso,
Katia
Ah, sí... he sentido algo así. Qué lindo que va este blog, eh!
Besos
G.
bruja madre (si cabe la contradicción)
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