sábado, noviembre 14, 2009

"Un final feliz"

Agarré uno de los libros que me regalaron para mi cumpleaños 40 y él me agarró a mí. Nos devoramos en dos días y aquí me quedé un poco impresionada porque creo en eso de que las lecturas llegan cuando uno las necesita, y deseo no necesitar tanto de lo que da esta lectura.

Me atrajo cuando leí que se trataba del fin de una terapia. De un final feliz. De una mujer que luego de haber realizado terapias psicoanalíticas –es rioplantense- intenta una terapia lacaniana. Y consigue terminar la terapia, llegar a ese final feliz. Con ganas de meterme directo en la historia, me salteé el prólogo.

La protagonista trabaja en medios, es escritora, es fotógrafa, y es quien escribe. Junto a la terapia lacaniana se encuentra con el desconcierto de sí misma y aprende la plenitud. Vive. Se desaprende cuando se desprende de los discursos que la construyen y descubre que la historia no está en encontrarse sino en perderse, en olvidarse de todos esos discursos repetidos que a una la ubican en un lugar determinado, fijo. Despegarse de la neurosis cuesta no sólo porque es cómodo moverse en los discursos conocidos, aunque sea tremendamente limitante, sino también por los demás que esperan que uno actúe de acuerdo a ese libreto compartido. Abandonar lo conocido desconcierta. Además, por más que se deje atrás un personaje repetido, dejarlo ir implica un duelo.

Entonces la protagonista aprende a vivir. Incluso cuando le descubren un cáncer, vive. Le sacan una teta y ella emana sensualidad. Vive. Va a quimioterapia tostada, con un top y toda pintada. Se rehúsa a ser víctima. Se separa de las miradas estigmatizantes de los demás. Vive con plenitud. Y muere con 40 años.

Esta última parte me impresionó y volví al prólogo. Googlée a la autora para saber más de Gabriela Liffschitz de quien nunca había escuchado hablar. Así descubrí que es un libro póstumo. Por más que la solapa del libro lo dice, no lo entendí hasta el final.


De sus fotos en la Web

Nota de Página 12 a pocos días de su muerte en febrero de 2004


Gabriela Liffschitz. Un final feliz (relato sobre un análisis) Ed. Eterna Cadencia (2009. 1a ed. 2004)

PD: Debí decir terapias psicoanalíticas freudianas, aunque en el Río de la Plata, psicoanálisis y psicoanálisis freudiano son casi sinónimos.

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